lunes, 1 de septiembre de 2008

Adis Abeba, domingo 31 de agosto de 2008

Hace ya una semana que hemos llegado. Las lluvias son diarias. Por un lado una bendición, por otro lado hacen la vida muy difícil. Son torrenciales y la mayoría de personas se cobijan en techos endebles y que apenas les permite protegerse de las mismas. La ropa del orfanato y de la clínica tarda días en secarse. Todo esta lleno de barro. En la clínica siguen llegando malnutridos, ahora son tipo Kawsiorkor (llenos de edemas por falta de proteínas) mientras que en abril eran mas tipo marasmaticos. La gente apenas tiene acceso a las proteínas (carne, huevo, leche, pescado), demasiado caro. Se alimentan básicamente de arroz y cereales.
En ocasiones les dan té y pan a los niños como único alimento. Nosotros en el orfanato estamos bien adaptados. A veces nos sentimos algo solos a pesar de estar rodeados de mas de 500 niños. Claro está que es el principio. Disponemos de dos habitaciones con lo imprescindible: cama, mesa, taburetes y armario para la ropa. Todo un lujo.
El próximo martes mis hijas empiezan ya el colegio en una escuela británica. Sera el momento de hacer amistades. Los voluntarios empiezan a regresar a sus países, a su vida diaria y las despedidas también nos producen tristeza. Hay que ver lo cercano que hace sentirte el compartir estos momentos de vida con gente tan diferente a nuestra vida cotidiana en Barcelona.
Procuraremos manteneros informados con regularidad.
Abrazos

No hay comentarios: